Gracias a la sanación intergeneracional, se da la posibilidad de que actos negativos y pecaminosos de los antepasados puedan ser sanados y así evitar que afecte nuestra vida o la vida de generaciones futuras.
Hay varios caminos de salvación, uno de ellos es la Sanación Intergeneracional. Es cierto que se heredan enfermedades, sentimientos, emociones de nuestros antepasados pero el Nombre, la Sangre y la Palabra de Jesús rompen ataduras y nuestras generaciones pueden ser libres. Además debemos recordar que aunque influyen nuestros antepasados sobre nosotros, tenemos libre albedrío el cual nos da la opción de elegir patrones sanos de comportamiento ante cualquier circunstancia.
La Sanación Intergeneracional se centra en el perdón. Perdonar toda falta de amor que haya generado amargura, resentimiento y odio.
PÁGINAS: 180
TAMAÑO: 11X18 CMS.
